FUENTE: ABC España
El pueblo de Ávila que sorteó la prohibición del Carnaval vistiéndose de luto y reuniéndose en casas
En Cebreros, sus vecinos se resistieron a la veda en los años 50 y con dos siglos de historia hoy se vuelcan en una fiesta con mucha tradición
En los años cincuenta se intentaron suprimir los carnavales en toda España, pero en Cebreros los vecinos se resistieron. Para evitar problemas se vestían de luto, con ropa negra y brazaletes, y se reunían en las casas para bailar y beber vino. Los niños vigilaban y avisaban si aparecía la Guardia Civil, aunque el Gobernador de Ávila tuvo que asumir que la fiesta no se iba a suspender y acabó eliminando las multas. Los festejos cambiaron su nombre a Festivales de Invierno pero se mantuvieron vivos. Gracias al empeño de sus habitantes, no han dejado de celebrarse en los más de doscientos años en los que se remonta la tradición en la villa y hoy en día forman parte de los más populares del país. No en vano son Fiesta de Interés Turístico Regional.
La localidad se vuelca con su carnaval. Es la fiesta más importante para los cebrereños, por encima de las fiestas patronales que tienen lugar en el mes de agosto. De hecho, los participantes del desfile comienzan a preparar los disfraces muchos meses antes de Carnaval, habitualmente en verano, y el Ayuntamiento les cede naves para poder construir las carrozas, ya que algunas pueden llegar a medir más de 5 o 6 metros de altura.
Así, el municipio se transforma durante los días de Carnaval. Y esa vestimenta de luto que trataba de sortear las prohibiciones ha ido tomando color con el paso del tiempo. Desde el saco de esparto con el que se cubrían la cara en el siglo XIX y los trajes de ropas viejas, ropones aderezados con cencerros y esquillas, al traje típico de la villa formado por manteo y mantón de manila para las mujeres y el traje de cebrereño con pantalón y chaqueta negra, fajín rojo y el sombrero pirolo. Algunos son verdaderas joyas de la costura, de elaboración manual, con excelentes tejidos, diseños y maquillajes.
En Cebreros la fiesta se celebra en grupos formados por amigos y familiares que salen a la calle todos juntos en el desfile de Carrozas y Comparsas el primer domingo de Carnaval. La Banda Municipal de Música va abriendo el paso a ritmo de la jota cebrereña y otras canciones típicas. Tras ella, sale a escena la Asociación de Amas de Casa vestidas con el traje típico cebrereño, el manteo, y habitualmente también las acompañan hombres ataviados con el traje típico compuesto por la capa española y el sombrero pirolo. Colocados en parejas, uno en frente del otro, avanzan bailando.
Tras el sello tradicional, el siguiente domingo, en el conocido como fin de semana de Piñata, tiene lugar el desfile provincial, que cuenta con más de dos mil participantes y cerca de veinte mil asistentes. Este concurso se celebra desde 1998 y en él participan los grupos de carrozas y comparsas de los diferentes pueblos de Ávila contra los ganadores del primer premio del concurso local.
La fiesta se prolonga durante ocho días. El lunes y el martes de Carnaval son fiesta local y cuando más disfruta la gente de la localidad con pasacalles. El programa incluye charangas, actividades infantiles, un encierro carnavalesco de carretones, el tradicional Entierro de la Sardina y el baile del Rondón, también conocido como el Corro, en el que se danza la jota en parejas formando un círculo alrededor de la Plaza.